La vuelta de vacaciones

Que ya estamos todos. Que parecía que esto no se iba a acabar. Que daba gusto circular por Guadalajara. Pero como no hay bien que dure cien años o como se diga, a vuelto la odiosa normalidad de siempre, ósea se unos atascos del copón, un no poder donde aparcar, un siempre llegar tarde, nervios, stres… En cima con el calor que hace que todo el mundo va mas alterado.

Si es que daba gusto y no lo apreciábamos (como la enfermedad en cuerpo sano) que yo salía de casa por la mañana para currar a las nueve menos diez y a las nueve menos cinco ya estaba como un campeón en mi puesto de trabajo y hoy que he ido una hora antes (Hora extra remunerada) he salido a las ocho menos diez y he llegado a las ocho y casi diez. Hace una semana Salía a las siete de currar y aparcaba mi carro en la puerta del bar en pleno centro de Guadalajara para tomar una cervecita fresca, y hoy después de dar dos vueltas a la manzana a paso tortuga me he ido a casa amargao, desesperao… y en cima hoy viernes fin de semana con las ganitas que yo tenia que venia saboreando la cerveza con los colegas desde las cinco de la tarde.

Ya lo venia yo viendo a lo largo de la semana el lunes todavía estaba bien, mas o menos se podía conducir relajadamente, pero poco a poco a medida que transcurría la semana se iba complicando y hoy ha sido el acabose hemos vuelto a la situación normal es decir masificacación de coches, luego en cima la gente que viene de vacaciones yo no se pa que se va. Pa “descansar y relajarse”, dicen y vuelven alterados que se suben por las paredes, te pitan, se cuelan, te hacen cortes de manga, vamos que el coche en ciertas manos es un arma arrojadiza, ¿será el síndrome postvacacional?

Luego regresan también los indeseables, ese tipo de gente que como el caos circulatorio casi no notas cuando se va pero que cuando lo tienes delante se te cae el mundo encima ¿“Pero bueno tu existes”? ¿”Aquí otra vez”? con lo a gusto que estábamos. Bueno hay que reconocer que también regresan los colegas para contarte sus batallitas veraniegas, que también hace falta paciencia para aguantar a algunos, pero eso es carne para otro post.